El profesor Stewart nos lleva a una nueva concepción de la regularidad –la de la matemática del caos- que da sentido a la complejidad de la vida real: desde las inexplicables volteretas de un satélite de Saturno a los latidos de nuestro corazón, desde la previsión meteorológica al crecimiento de las poblaciones de insectos. «Se trata –nos dice el autor- de un mundo nuevo, un nuevo tipo de matemática, un descubrimiento fundamental en la comprensión de las irregularidades de la naturaleza.» Conceptos como el de «fractal» no sólo sirven para entender cómo se ha creado la cosmografía imaginaria de La guerra de las galaxias, sino que resultan hoy indispensables para «captar la textura de la realidad».
Lo admirable es que Stewart acierta, además, a explicarlo con sencillez, recurriendo al ejemplo o a la anécdota, sin utilizar formulaciones matemáticas ni recurrir a la jerga del especialista. Éste es un libro que resulta francamente entretenido, pero que nos va a enriquecer, además, con una visión enteramente renovada del mundo y de la ciencia.