La presente obra propone una nueva forma de llevar a cabo el aprendizaje en el laboratorio de anatomía humana. Esta estructura integra de forma excepcional 4 conceptos: disección, prosección, anatomía por imagen y procedimental. Cada una de estas actividades tiene una contribución en la aplicación del conocimiento anatómico, fundamentado en el razonamiento clínico.
La disección es una herramienta muy útil para el aprendizaje y es considerada un pilar fundamental. La prosección permite demostrar, identificar, describir, comparar y analizar estructuras anatómicas complejas, de difícil acceso o preservación. La anatomía por imagen es la forma como la anatomía del paciente se presenta en la clínica. En este punto es importante la identificación y la descripción anatómica donde se empleen los términos de posición y relación de forma adecuada. El empleo de procedimientos clínicos durante la práctica de laboratorio permite aplicar el conocimiento anatómico con un fin claro y útil en su formación profesional. Esta forma de apreciar la anatomía, sin duda, le permitirá entender el fundamento anatómico de los procedimientos.
La integración de estos conceptos permite al estudiante tener una representación de las estructuras de forma real, a través del estudio de imágenes (radiografía, tomografía computarizada, resonancia magnética, entre otros) y de su entendimiento en la realización de procedimientos clínicos o quirúrgicos (por ejemplo: punción lumbar, venodisección, etcétera). La obra cuenta con un sitio web complementario en donde el estudiante encontrará imágenes y ejercicios que ayudaran al repaso.
Estas características son herramientas útiles que, integradas de forma estratégica, permitirán desarrollar el pensamiento crítico, bajo una estructura ordenada y fundamentada en el razonamiento clínico.