Para la mayoría de la gente, Teo no es un chico normal, sino un simple animal, un ser despreciable. Teo no entiende el porquè. Suerte que el dueño del país, el viejo Mateo Alacrán, apodado El Patrón, le ha cogido cariño y le protege de la hostilidad de los demás. ¿Por qué ese viejo de 140 años es tan cariñoso con él? Este interrogante obsesiona a Teo, que al mismo tiempo se siente fascinado por su viejísimo protector. LLegado a la adolescencia, descubrirá el misterio de esta atracción: ambos comparten el mismo ADN, Teo es Mateo Alacrán, y eso significa un terrible peligro para él. Ambientado en el imaginario estado de Opium, situado en la frontera entre EE.UU. y Aztlán (México), esta apasionante novela nos descubre la lucha de un chico valiente que se rebela contra su suerte y consigue cambiar el curso de los acontecimientos gracias a su determinación y a la amistad de quienes han sabido ver más allá de su prejuicios. Una novela de ciencia ficción muy actual, en un futuro tan próximo como peligroso.