De 8 a 10 años.
Ni se te ocurra enchufar en la consola ninguno de los extravagantes juegos de Papa Natas, un programador loco dispuesto a que todo el mundo muera bailando la conga. Para evitarlo tendrás que esquivar mil asteroides y ganar una carrera espacial de infarto, derrotar a un fantasma egipcio que toca el acordeón y poner en su sitio a los despiadados hombres-espárrago. Por no hablar de las afiladas multiplicaciones que te acecharán detrás de cada esquina.