¿Es hablar de comida sana y no te entra hambre? Eso es porque piensas en platos verdes, insípidos y aburridos, pero ¡nada más lejos de la realidad! Comer sano puede ser delicioso e incluso puede cambiar tu humor (para bien). Deja que te demos unos consejos para potenciar tu amor por el mundo vegetal, transformar tu lista de la compra, tus recetas y tus técnicas de cocción y para que te sientas mucho mejor por dentro y por fuera sin tener que empadronarte en tu cocina.