¿Cómo detener la carrera de la degradación ambiental? La ética sola no tiene medios para hacerlo. Pero cualquier medio tiene que contar con la ética. El egoísmo de los individuos, de las empresas o de los estados no es la solución, sino justo lo contrario. Ahora es el tiempo de luchar contra el calentamiento mundial y sus efectos cada vez más destructivos con el medio más poderoso: nuestra voluntad. Ya pasó el tiempo de no darnos por enterados. Y el tiempo de las excusas. Ahora estamos en el de acometer de una vez las medidas de salvación del planeta. Y, por ello, es el tiempo de tomarnos en serio la responsabilidad moral frente al medio ambiente. Este libro sostiene la necesidad de un imperativo ecoético. Lo explica y lo justifica. Dice quiénes y por qué tenemos deberes hacia el medio y el conjunto de todos los seres. Es un libro de ética, bien fundamentado y de clarísima expresión, al alcance de todo lector o lectora interesados por el medio ambiente. O por la ética en general. Nos viene a decir: los buenos propósitos sin responsabilidad son sólo palabras, pero la responsabilidad sin obligaciones es nada. Contra el desastre ambiental, hay que hacer; hacerlo bien, y pensando en las consecuencias de nuestros actos por el entorno y en los valores de los que emanan dichos actos. La ética del medio ambiente tiene sus propias maneras y motivos. Pero es parte de la ética en general. Del asumir todos y todas, de manera consecuente, nuestra responsabilidad.