Cuando en una familia llega un hijo con TEA, sus características influyen claramente en la adaptación psicológica de los progenitores añadiendo nuevos desafíos para enfrentar. Pero también existen otros factores, hasta ese momento desconocidos, que impiden que algunas familias se fortalezcan y superen la situación con éxito. Después de años de práctica clínica, la autora revela algunos de estos factores, y comparte que la adaptación psicológica está significativamente influida por la forma en que las familias se replantean la situación vivida y por cómo se las arreglan para hacerle frente unidas.