La base de todas las enseñanzas de Buda consiste en que la infelicidad humana se asienta fundamentalmente en tres elementos: la ignorancia, el apego y la ira. Y, de hecho, la ira, como ha demostrado la ciencia, puede causar graves daños psíquicos y físicos. Sin embargo, no sólo podemos dominarla, sino incluso convertirla en una fuerza positiva, para lo cual disponemos de las herramientas necesarias en nuestro interior.