No existe la mínima duda de los amplios beneficios del deporte: mejora la forma física, la resistencia, la flexibilidad; regula la presión arterial; ayuda a perder peso, mantener fuertes las habilidades del pensamiento, dormir mejor; fortalece los músculos, tendones, ligamentos, articulaciones…; reduce el riesgo de padecer diabetes y decenas de enfermedades; es una excelente válvula de escape para la depresión, el estrés y otros padecimientos psíquicos, etc.